miércoles, 14 de marzo de 2007

15 horas después

Bueno, pude ver a mi Defecto Perfecto. Es fue bueno. Bella, hermosa, linda, tierna... y con el alma más chingativa en una mujer que he conocido.

Bueno, a pesar de todo, verla no fue tan malo - aunque duela admitir la idea de no verla a mi lado. Me encanta y parece que pronto, no habrá nada por hacer para evitarlo. Hoy ella es la única, la mejor, quien tiene poder sobre mí como nadie más tiene.

Y me duele aun más ver que sufre. Me siento atado de manos y pies pues no puedo hacer algo para ayudarla. No por que sea una situación difícil, complicada, insuperable... no puedo hacer para por que ella no quiere dejarme ayudarle. Necesita entender eso.

Lamentablemente, mi pequeño Defecto Perfecto sigue siendo eso - un pequeño defecto, sigue siendo una niña.

Te adoro.